No me elige y no me elegiría.
Después de todo el quilombo sucedido hace dos semanas, donde decidí dar un paso al costado y hacer como si nada hubiese pasado.
Decidí, por más que me duela, seguir dando mi mejor versión, siendo amorosa, comprensiva, presente, estando siempre con la energía más positiva y siendo empática, tanto sentimentalmente como compartiendo sus gustos, ya que siento que eso nos une.
Aún así, teniendo él un solo día libre para vernos, elige no hacerlo.
Ahora, yo ya habiendo caído y digerido que nuestro vínculo iba a ser de esa forma, pero igualmente creyendo que había una preferencia sobre mi persona, me encuentro con que elige pasarlo con otra.
Me venía amagando a hacer algo hoy ¿y que pasó?
Almorzó conmigo ayer jueves y eso ya fue suficiente.
Lo peor es que lo voy a acompañar a ver su show favorito, lo sigo escuchando toda su rutina y sus problemas.
Encima, como si fuera poco, me suele tirar "jodas" que suenan tóxicas, de celos. Ya no entiendo.
Dado que mi estrategia no funciono, tendré que plantear una diferente: contestar mas lento, interesarme menos y desaparecer más.
Una lástima. En serio me duele, porque sí cambio el vínculo desde entonces, donde siempre se me preguntaba que día podía y de ahí se amoldaban sus planes. Ya no, ahora hay que acomodar lo que probablemente sea una conquista reciente.
Yo no soy segunda de nadie al que le deposito este nivel de energía, de entrega, de cariño; porque increíble cómo soy con la gente que me importa. A pesar de que me de con muchas cosas con un palo, me reconozco que para la gente que me involucro, estoy siempre y lo doy todo. Sacrifico mucho de mí.
Cómo le dije a Gabriel en su momento y año después me lo recriminaba, me vas a extrañar, con todo lo que implica la letra de ese tema.
Mientras, apenas se me vaya este virus, me voy a enfocar tanto en mi, trabajando duro y en silencio, que no hay forma de que el resultado no sea distinto.
A mis pies, como todo. Porque la gente siempre me extraña, porque siempre desean que tengan a alguien como yo en su vida.
Me tuviste y me perdiste.
Me tuviste días mal, cuestionando que hago y con mil dudas.
Ya no más.
Y ojalá, perdón por ser tan vengativa, que conozca a alguien que este dispuesto a dar todo por mí, que me encante tanto como yo le encante a él y nos entreguemos al 100%. Y que vos te quieras matar. Que estés mínimo el décimo de triste y perseguido que lo que estuve.
Tuviste a una Vale en tu vida, y la dejaste pasar.